Home / Provinciales / “La causa Malvinas ya no es una causa nacional, sino una regional de soberanía y una global de lucha contra el colonialismo”

“La causa Malvinas ya no es una causa nacional, sino una regional de soberanía y una global de lucha contra el colonialismo”

Lo dijo hoy la presidenta de la Nación Cristina Fernández de Kirchner, al encabezar hoy en Puerto Madryn, junto al gobernador Martín Buzzi, el acto central por el 31 aniversario de la Guerra de Malvinas. La mandataria destacó a Madryn como la ciudad que recibió a los soldados argentinos tras el conflicto de 1982.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner encabezó hoy en Puerto Madryn, junto al gobernador Martín Buzzi, el acto central por la Gesta de Malvinas, a 31 años del 2 de abril de 1982. La ceremonia fue realizada junto al Monumento a los Ex Combatientes y Caídos en Malvinas, escultura montada sobre el mapa recortado de las Islas Malvinas, en la que un soldado hace flamear la bandera argentina y otro, de cara al cielo, sostiene en sus brazos a un combatiente caído.
Puerto Madryn continúa siendo una ciudad emblemática para los ex combatientes, pues a través de su muelle regresaron, en junio de 1982, miles de combatientes argentinos a bordo de las naves «Canberra», «Northland» y el «Almirante Irízar».
En ese marco, Cristina Fernández de Kirchner fue declarada Huésped de Honor tanto por el Poder Ejecutivo Provincial como por la Intendencia de Puerto Madryn que encabeza Ricardo Sastre.
La mandataria llegó a la ciudad junto al vicepresidente Amado Boudou, y acompañaron en la comitiva el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina; los ministros nacionales de Economía, Hernán Lorenzino; de Turismo, Enrique Meyer; de Agricultura, Ganadería y Pesca, Norberto Yauhar; y de Industria, Débora Giorgi; además del canciller Héctor Timerman e integrantes del cuerpo diplomático; el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Julián Domínguez; y el secretario general de la Presidencia Oscar Parrilli, entre otros funcionarios, diplomáticos y legisladores de distintos partidos políticos.
Al arribo al pie del monumento a los ex combatientes de Malvinas, el gobernador Martín Buzzi saludó, junto a la Presidente, a familiares de los caídos en la guerra, tras lo cual depositaron una ofrenda floral ante el monumento que recuerda la gesta.
Inmediatamente después, frente a la guardia de honor de los Granaderos a Caballo “General San Martín”, se realizó un minuto de silencio y se interpretaron tanto las estrofas del Himno Nacional Argentino como la Marcha de las Malvinas, a cargo de un coro local y de la Banda de Música de la Policía de Chubut.
En el inicio del acto, el gobernador Buzzi entregó a la Presidenta el decreto que la declaró Huésped de Honor de la Provincia junto a un presente consistente en un el libro “Malvinas: Soberanía, Memoria y Justicia. 10 de junio de 1829”, escrito por Sergio Caviglia y editado por el Gobierno de la Provincia del Chubut para distribuirse en escuelas y Centros de Excombatientes de la provincia. La publicación cuenta con prólogos realizados por el gobernador Martín Buzzi y por Eduardo Vidal, del Centro de Veteranos de Guerra de Malvinas de Rawson. Por su parte, el intendente Ricardo Sastre hizo entrega de la resolución que la declaró Huésped de Honor de la ciudad y un cuadro con fotografías tomadas cuando los soldados descendían del buque Canberra y eran trasladados hasta una barraca en la ciudad de Madryn.
En su alocución Buzzi agradeció “la decisión presidencial de realizar el acto central por el 2 de abril en Puerto Madryn”, y recordó que “para los patagónicos, las Malvinas y la Guerra de Malvinas fue vivida como algo muy íntimo, muy cercano”.
Finalmente, el primer mandatario provincial señaló a la Presidenta que “esta es su tierra, esta es su provincia. Bienvenida junto a la presencia de los embajadores de los distintos países de América Latina que nos acompañan, porque de la mano de una América Latina unida, fortalecida y con una estrategia común, sin duda, las Islas Malvinas están mucho más cerca”.
Los veteranos “siguen siendo combatientes”
Por su parte, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner definió que “los soldados que lucharon en la guerra no son ex combatientes”, sino que “siguen siendo combatientes de la soberanía por Malvinas”.
Cristina Fernández de Kirchner se mostró “feliz de estar en Puerto Madryn”, y destacó “la presencia de movimientos sociales y asociaciones de derechos humanos”, además de resaltar “la posibilidad de dirigirnos a los argentinos en esta fecha tan especial”; tras lo cual destacó la referencia que minutos antes realizara el gobernador Buzzi respecto de cómo se vivió la guerra en la Patagonia.
En ese sentido, trajo a la memoria que “en Río Gallegos estábamos en la ciudad más cercana en línea recta a Malvinas. Vivíamos bajo la amenaza de bombardeo, porque se temía la inminente llegada de un ataque que buscara terminar con la resistencia” argentina en la guerra.
Recordó particularmente que “todas las noches debíamos realizar los operativos de oscurecimiento, y colgar frazadas en nuestras ventanas, además de colorar los adhesivos negros en los vehículos para que apenas fueran una línea visible durante las noches y no se pudiera identificar la marcha de un coche. La ciudad se sumergía en la más profunda y terrible oscuridad, mientras se escuchaba el rugido de los aviones que salían y muchas veces no volvían”.
“Hoy estamos aquí y hemos hecho la elección de estar aquí en Puerto Madryn porque este 2 de abril es un homenaje instituido por el pueblo argentino a través de su parlamento a todos los veteranos y a todos los caídos. Estamos en Madryn porque aquí regresaron ocultados, desde las islas al continente, en el Canberra, en el Northland, en el Irízar y en el Bahía Paraíso casi 8.000 de los casi 11 mil combatientes que estuvieron allí. Los ocultaron, pero como indica el testimonio fotográfico que me obsequió el intendente de Madryn, este pueblo argentino que nunca ha traicionado la memoria de los que lucharon por él y murieron por él, salieron a la calle a recibirlos, a entregarles comida, a permitirle hablar por teléfono desde su casa, para comunicarse con sus familiares. Luego fueron escondidos en un edificio de acopio de lanas Lausen”, dijo la Presidente al recordar el hecho histórico vivido por los habitantes de la ciudad elegida para desarrollar el acto.
Posteriormente, argumentó: “Por eso decidimos estar hoy aquí en Puerto Madryn, para decirles a todos esos ex combatientes y a cada uno de esos argentinos, que a lo largo de estos 200 años de historia han luchado por la independencia, por sus ideales, por la Patria y por el prójimo, que jamás volverán a ser olvidados, jamás volverán a ser ocultados y porque son la Gloria de la Nación y las Glorias se conmemoran y se festejan, no se ocultan”.
“Cómo no reconocer ni homenajear a esos jóvenes que sin preparación y sin elementos, abandonados a su suerte y de Dios, a su pericia o impericia, los mandaron a enfrentar a un enemigo profesionalizado. Y digo enemigo porque era una guerra. Y hablo en esos términos porque era una guerra, porque hoy la Argentina no tiene enemigos, su único enemigo es el hambre y la desigualdad. Ningún pueblo de la tierra, ningún ser humano es enemigo del pueblo argentino o de la Argentina por el hecho de pensar diferente, tener un idioma diferente o una nacionalidad diferente”.
“Seguiremos reclamando que se cumpla con el derecho internacional”
“Seguimos pidiendo incansablemente, como lo haremos en otras causas, que se cumpla con el derecho internacional” y pidió “que no nos confundan, que no nos desvíen ni utilice el Gobierno del Reino Unido la cuestión Malvinas para ocultar el desastre económico que sucede hoy en Europa producto de políticas de ajuste, atraso y saqueo a trabajadores, pequeños, medianos comerciantes y empresarios”, agregó.
“Hoy leía que han propuesto un nuevo ajuste en Londres, y que el partido gobernante está dispuesto a sacrificar a su líder en pos de ese ajuste. Pero pregunto por qué no se animan a hablar con un Gobierno democrático, con un Gobierno que ha hecho de la libertad de los pueblos -y de Latinoamérica también- y los derechos humanos una bandera inclaudicable”, sostuvo Cristina Fernández.
En el mismo contexto, dijo que “sin embargo estaban dispuestos a dialogar con una dictadura sangrienta y genocida. Es incomprensible, en este siglo XXI, negarse al diálogo”, manifestó y enfatizó que “ni en esa resolución de las Naciones Unidas se le da la razón a uno o a otro, sino que se reconoce que hay una cuestión de conflicto sobre la soberanía y se pide el diálogo. Cómo puede alguien negarse al diálogo y considerarse del lado de los países civilizados. Creo que las cosas no se van a poder mantener así durante mucho tiempo, hay demasiada incoherencia e incongruencia”.
Opinó además que “los pueblos merecen que los gobiernos se ocupen de los verdaderos problemas que tienen esas sociedades y no distraigan recursos en armamentos inútiles, porque lo único que hacen es militarizar el Atlántico Sur    que hoy está libre de todo conflicto”.
En cambio, “les vamos a responder con un gran proyecto que estamos encarando con el Gobierno de Chubut, el Ministerio de Ciencia y Tecnología y el Gobierno de Canadá. Mientras ellos envían naves de guerra al Mar Argentino, nosotros vamos a enviar un buque científico. La guerra sólo sirve a los que fabrican y venden armas. Nosotros queremos crear conocimiento, generar ciencia y aplicarla; queremos saber todos los recursos y potencialidad que tiene este Mar Argentino”.
En tal sentido, la mandataria nacional insistió en remarcar la importancia de “que mientras mandan buques de guerra nosotros enviaremos buques científicos”.
“Identificar a los soldados NN”
Por otro lado, la Presidenta de la Nación se refirió a otro de los compromisos asumidos por su gestión “con los familiares de esos 123 soldados no identificados argentinos que yacen en el Cementerio de Darwin. A través del Ministerio de Justicia, y tal como nos habíamos comprometido, ya hemos localizado a cien familiares y 91 familiares nos han firmado para acompañar el pedido que ya habíamos ante la Cruz Roja Internacional para avanzar en lograr la identificación de esos soldados y que se le pueda colocar una placa con su nombre y apellido. Que cada madre y cada padre pueda hincarse ante la tumba y ponerle una flor. No estamos pidiendo más que eso, un elemental ejercicio del más elemental de los derechos humanos como es velar y honrar a nuestros muertos”.
En tal sentido, describió que “estamos en marcha con ese plan, con uno de los más eficaces y eficientes equipos de identificación de ADN”, sostuvo Cristina Fernández, y renegó contra aquellos que “nos quisieron hacer olvidar que las Malvinas son argentinas y que son una causa inclaudicable para todos nosotros. Pero ya no son una causa solamente argentina, porque si de algo me enorgullezco, si de algo me siento plena es por haber logrado el acompañamiento de todos los mandatarios de América Latina y convertir la causa Malvinas ya no en una causa nacional, sino en una causa regional de soberanía y una causa global de lucha contra el colonialismo”.
Dicho posicionamiento “es porque tenemos aquí muy cerca uno de los últimos vestigios, una de las lacras que más avergonzaron las últimas centurias de la humanidad, que más la ennegrecieron, que fue el coloniaje de las grandes potencias. Creo que ahora quedan cerca de 16 causas de colonialismo actualmente, de las cuales 10 son inglesas. Si uno observa el mapa del mundo 200 años atrás, la mayoría de los grandes territorios del mundo eran colonias. Si bien hoy han cambiado los métodos de colonización, porque mutaron en el último siglo en ocupaciones económicas y colonización cultural, lo que hace que tal vez no tan visibles, ni palpables e identificables, sin embargo son tan o más mortíferas que la geográfico-territorial”.
“Superar las diferencias”
La Presidenta manifestó, “frente al pueblo de la Patagonia y todos los argentinos, el compromiso irrenunciable de esta causa, porque es una causa de Estado. En ello, quiero agradecer a los representantes de los distintos partidos de la oposición, porque es bueno que los argentinos estemos unidos”, porque “cada vez que nos hemos dividido, los argentinos pagaron muy caro esa desunión y confusión que nos han introducido en la cabeza. Porque creemos que el otro, porque está en un lugar político diferente, porque tiene un color de piel diferente, porque tiene más o menos instrucción, es un enemigo. Yo les pido a todos, en honor de esos argentinos, que entregaron todo por la Patria, que cuando miren hacia el costado o frente a sí y vean a otro argentino, vean a un hermano con el cual hay que superar las diferencias, con el cual hay que coincidir en lo importante. No hace falta pensar todos igual, pero siempre hay que pensar antes de tomar una decisión, antes de decir una palabra que separe, pensar en a quién servimos haciendo eso. A quién le sirve que yo me pelee con el otro”.
Homenaje a un joven militante de Rawson
A su vez, “en este día de recuerdo y homenaje” señaló que “si no se quiere al pueblo o al próximo, es imposible querer a la Patria. La Patria es el prójimo. No nos olvidemos nunca de eso: la Patria es el otro, no es un concepto vacío ni abstracto”.
Finalmente, Cristina optó por terminar su intervención “con un homenaje de lo que para mí debe ser un ideal del amor al prójimo. Homenajear a un joven militante político de la ciudad de Rawson, Matías Gensana, un joven de 24 años. Este último 3 de enero, ese joven estaba en Playa Unión y vio que tres niñitos estaban ahogándose, y no lo dudó un instante en arrojarse con su primo al mar para salvarlos. Los salvó a los tres, pero a él se lo llevó el mar. Qué inmenso ejemplo de amor al prójimo”, destacó la Presidenta.
“Qué inmenso ejemplo de dar la vida sin pedir nada a cambio. Me viene a la memoria la palabra de Néstor: los que se la pasan especulando nunca van a pasan a la historia. A la historia pasan los que se la juegan todos los días, todo el tiempo, por la Patria, por el otro y por la vida”, concluyó, en medio de una ovación de las miles de personas que siguieron el acto en Puerto Madryn.