El fiscal Jefe, Carlos Díaz Mayer, junto al funcionario Ismael Cerda, presentaron ante el juez Jorge Novarino, la acusación pública por el crimen de Brian Alejandro Espósito. Dos de los imputados decidieron declarar antes de la audiencia preliminar dando una versión distinta de los hechos. Las defensas se opusieron a la teoría de la Fiscalía, hubo un pedido de sobreseimiento y uno de cambio de calificación legal. Ambos cuestionamientos fueron rechazados por el juez Jorge Novarino. Se dispuso la continuidad de la prisión preventiva de los imputados.
El debate tendrá lugar del 2 al 6 de agosto con un tribunal que estaría integrado por los jueces Fernanda Révori, José Luis Ennis y Ricardo Rolón.
El juez entendió que es suficiente la descripción de conductas y las evidencias expuestas en la audiencia, por lo que no hay imprecisión como plantearon las defensas. Hay un cúmulo de evidencias abundante, pero no hay una prueba concreta de descargo que claramente contraponga la acusación. La declaración de los imputados “no es la verdad revelada”, tienen derecho a declarar en cualquier momento del proceso, pero no es una declaración jurada, sino que puede declarar todo lo que estime pertinente a sus fines. El magistrado consideró que la evidencia subjetiva que surge de la declaración de los imputados, no es suficiente por sí sola para contrarrestar el cúmulo probatorio que la Fiscalía pretende llevar a juicio.
El hecho
La Fiscalía sostiene que cerca de la medianoche del 18 de abril de 2021, los cuatro imputados se hicieron presentes en la vivienda de Brian Alejandro Espósito, ubicada en Isla Sur de la localidad de Lago Puelo. Uno de ellos llevaba un bidón que contenía un líquido inflamable, presuntamente nafta, otro portaba un trozo de caño de gas. La hipótesis de la acusación es que previamente habían acordado “ajusticiar” a Brian, a quién acusaban de haber incendiado en horas de la mañana la vivienda de uno de ellos.
Brian estaba en su casa junto a dos amigas cuando cuatro o cinco sujetos golpearon a su puerta, la abrieron e ingresaron vestidos con ropa oscura y con pasamontañas. Les gritaron a las mujeres que se retiraran de la vivienda, mientras golpeaban en el piso a Brian, para luego rociarlo a él y a gran parte de la vivienda, con el contenido del bidón. Prendieron fuego y huyeron.
Brian resultó con quemaduras que afectaron el 90% de su cuerpo. El 19 de abril, en horas de la tarde, falleció cuando se hallaba internado en el Hospital Zonal de Esquel. Las conductas fueron calificadas provisoriamente como constitutivas de homicidio agravado por haber sido perpetrado con ensañamiento por un medio para crear un peligro común y con el concurso premeditado de más de dos personas en carácter de coautores.