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Se trata del Movimiento Comarcal Justicialista de Trevelin. Los hechos ocurrieron ayer 2 de diciembre, cuando “hemos encontrado el local del Movimiento Comarcal Justicialista de Trevelin forzado en sus ventanas y ultrajado en su interior”, dijeron en un comunicado en el que agregaron que los vándalos no sustrajeron bienes materiales del local pero “sí carpetas que contenían relevamiento diagnóstico situacional, lineamientos, ejes de trabajo y proyectos pensados para tal fin”.
El Movimiento Comarcal Justicialista de Trevelin, que se apartó de Chubut Somos Todos y comenzó a trabajar para la candidatura a la reelección del gobernador Martín Buzzi, denunció que viene “sufriendo agravios por redes sociales y ahora un robo a su local partidario”, a través de un comunicado de prensa que difundió a los medios y que fue titulado “los agravios y ataques que recibe la Agrupación Movimiento Comarcal Justicialista por estar con Martín Buzzi”.
La agrupación, cuya referente es Cecilia Torres Otárola, denunció de esta manera “la intolerancia política hacia una agrupación que ya no milita más en un espacio político del Chubut Somos Todos, y la cual ha venido sufriendo diferentes hechos de ataques y agravios por redes sociales”, a raíz de este alejamiento.
Los hechos ocurrieron ayer 2 de diciembre, cuando “hemos encontrado el local del Movimiento Comarcal Justicialista de Trevelin forzado en sus ventanas y ultrajado en su interior”.
La particularidad es que en el hecho no sustrajeron bienes materiales del local pero “sí robaron carpetas que contenían un relevamiento diagnóstico situacional, lineamientos, ejes de trabajo y proyectos pensados para tal fin”, indicó la agrupación.
Por ello agradeció a “aquellas personas, agrupaciones políticas y organizaciones civiles que se solidarizaron con nosotros, con quienes además consolidamos un solo pensamiento: la participación fortalece a la democracia, así que seguiremos en este camino”.
“Para aquellos que realizaron los hechos vandálicos les decimos: la producción de los militantes sociales no se diluyó, solo se llevaron los papeles…”, añadió.
Y concluyó: “Esperamos que estos hechos no sean el comienzo de un futuro años electoral enmarcado en amenazas, y agresiones y no sobre el debate que esta sociedad se merece hacia la construcción política y de sus dirigentes”.
