El joven patinador de Epuyén, dialogó con Chubut Deportes sobre su gran 2019 a nivel deportivo y cómo lleva la cuarentena junto a su familia.
Una de las grandes promesas del Patín nacional es el joven chubutense Tomás Lara. Con tan solo 16 años, actualmente se encuentra en la localidad de Epuyén junto a sus padres y un hermano mayor pasando la cuarentena.
Tomás es uno de los 44 atletas de la provincia que cuenta con una beca de Chubut Deportes y está muy agradecido por eso: “Es importante contar con la beca porque me ayuda a seguir y cumplir mis metas que tengo marcadas en el año, ya que este deporte es caro en todos sus aspectos y si queres llegar a algún torneo internacional o nacional es todo a pulmón de uno”, aseguró. Lo cierto es que méritos no le faltaban para estar entre las jóvenes promesas del deporte provincial.
En el 2019 participó de la Copa Freiburg en Alemania, “una de las más importantes del circuito europeo dentro del patín artístico”, explicó. “Era un gran apunte que queríamos cumplir ya que en el 2018, quede en entre los tres que podían y tenían las condiciones en ir, pero lamentablemente no pude por razones económicas”.
Por estas razones extra deportivas, el patinador se propuso como objetivo principal volver a estar entre los mejores del país en su categoría y poder viajar a Alemania. “Me prepare en toda la pretemporada, mediantes evaluativos que pone la Confederación Argentina de Patín Artístico para las distintas copas, me prepare para ellas y las realicé”, aseguró. El camino fue bueno, pudo clasificar al Sudamericano que se realizaba en Brasil y además a la Copa alemana. Pero esta vez, la cuestión de tiempos no le permitió realizar ambas, las fechas eran muy seguidas y solo podía ir a una de ellas; optó por ir a probarse en lo mejor del circuito europeo. “Durante el mes de mayo, viajé a Buenos Aires una semana antes para seguir preparándome. Llegó el día tan esperado para poder representar a Argentina y Chubut en el exterior cumpliendo un sueño, estar en una pista que siempre miré por una pantalla y poder pisarla con mis ocho ruedas. Con los colores de mi bandera, fue lo mejor que me pasó”.
El sueño se estaba haciendo realidad. Pero en la prueba oficial de pista, a un día de competir, sufrió un fuerte golpe: “En el momento no lo sentí tan fuerte hasta que competí el Short Program que tuve un resultado de 4° puesto entre los mejores del continente europeo. Pero faltaba todavía el “long program” para saber la sumatoria de los dos programas y el resultado final”.
Tomás comenzó a sentir el dolor del golpe luego de competir el primer día: “Competí el Long Program con ese dolor y no me esperaba un resultado que sea tan bueno. Pero pude lograr quedar entre los cinco”. El sueño estaba cumplido y su presentación lo ubicó entre los 5 mejores patinadores de su categoría en la competencia.
Nuevos desafíos en el 2020
De regreso en Argentina, Tomás comprobó que sufrió un desgarro. Permaneció alejado de la Pista durante un mes y medio y se perdió el Nacional. “Pero esto me ayudó a prepararme mejor para el 2020”.
“A fines del 2019 tuvimos un evaluativo para conformar el Seleccionado Nacional del 2020”, aseguró Tomás y agregó: “El pre-seleccionado participaría de la Copa Panamericana realizada en Quito, Ecuador. Participe de la revisión y tuve como resultado estar en el 3° lugar de los 8 patinadores, quedando en el pre-seleccionado nuevamente. Ya ahí tenía un objetivo claro que quería cumplir, además de tratar de entrar al Mundial”.
Este año se iba a realizar el Mundial de Patín Artístico en la categoría de Tomás en Paraguay. “A principios de enero viaje a hacer la pretemporada a Buenos Aires a marcar las nuevas coreografías y prepáreme para las competencias. La pretemporada fue fuerte, entrenar todos los días (algunas veces doble turno) con más de 30 grados, durante casi un mes”.
Sin embargo la pandemia del coronavirus suspendió todas las actividades deportivas. Tomás se encuentra en Epuyen entrenando diariamente para continuar en forma. “La cuarentena me ayudo a concentrarme más en mi mismo y poder tener los objetivos mucho más claros. Pero también a estar más en familia, ya que algunas veces nos perdemos momentos familiares por estar cumpliendo nuestras metas”, destacó.
“Pronto se cumplirán esos objetivos y sueño que teníamos, pero lo tenemos que hacer con dedicación, tiempo y esfuerzo. Por más que estemos en estos momentos difíciles no dejemos de perder esos objetivos y seguir entrenando lo mejor posible”.
Tomás no quiere perder la oportunidad de agradecer el trabajo diario que realizan sus entrenadoras Carola Aragón y Florencia Sacchero (“que siempre me motivan a más”, resaltó), como así también “a mi Federación (FEPACH) que están para cumplir cada meta”.
“Los objetivos de este 2020 los enía bastante claros y quería cumplirlos”, dijó Tomás para finalizar: “Pero como todos los atletas que tenían en claro algo en el corriente año, tuve que tratar de cambiar la página, para recargar energías y trasladar estos objetivos para cuando vuelva la competencia. Sea en el 2020 o el próximo año”.