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Fueron hallados de forma casual este martes por un trabajador rural que está construyendo un alambrado en el sector conocido como Arroyo Minas, a la altura del kilometro 1879 de la ruta nacional 40.
Ahora los investigadores procuran establecer si se trata de Salvador Paredes, un vecino de la misma localidad, quien desapareció en febrero de 2020, ya que las prendas “coinciden con las que vestía al momento de su desaparición”, adelantaron.
Los elementos encontrados en el lugar incluyen desde una campera negra y chomba oscura hasta un bóxer blanco con rayas rosas y un calzado tipo crocs, todo estropeado por el paso del tiempo y la exposición al fuego.
En consecuencia, hay personal del área de Criminalística de la Policía del Chubut al frente de las pericias para determinar fehacientemente si se trata de “Trino” Paredes, al tiempo que su familia espera cerrar este capitulo que comenzó hace cinco años con la denuncia de su desaparición.
El hombre, de 74 años, quien fue visto por última vez por su hijo el domingo 16 de febrero de 2020 y desde entonces su paradero fue un misterio. Según lo reconstruido, el familiar “advirtió la ausencia de su padre el lunes a las 10, cuando fue hasta su vivienda, ubicada en la calle Las Hualas (pegada al Centro de Jubilados) y no lo encontró.
En los rastrillajes intervinieron 40 personas de distintos organismos oficiales, más el concurso de dos canes adiestrados y vecinos que colaboran con drones. Sin embargo, nunca se obtuvieron resultados positivos.
Salvador Paredes, conocido popularmente en Epuyén con el seudónimo de “Trino”, había llegado hace 30 años procedente de Trevelin (de donde era oriundo) y siempre se dedicó a las tareas rurales. Era ampliamente conocedor de todas las chacras y campos de los alrededores, donde trabajó como leñatero, entre otros oficios.
Ello orientó las primeras pesquisas hacia ese sector, sin embargo los perros rastreadores llegaron repetidas veces hasta la ruta nacional 40 y allí perdieron las huellas, por cuanto se manejó también la hipótesis de que “pudo haber sido levantado por un vehículo”.
Acerca de su condición física, se aclaró por entonces que “desde hace un año se encuentra afectado por problemas de salud, pero eso no le impide movilizarse bien, aunque al ritmo lento propio de su edad”.
En coincidencia, los expertos trabajaron sobre datos aportados por personas que decían haber visto a un hombre de similares características camino a Cholila, en el paraje El Retamo, donde están emplazados dos altares del Gauchito Gil; además de otros sectores donde Paredes solía moverse. En todos los casos, no hubo pruebas certeras de su presencia por allí.
Al momento de ausentarse, el hombre vestía pantalón jeans azul claro, chomba negra, campera negra y crocs azul oscuras.
