Quiero manifestar públicamente mi más absoluto repudio, y el del Gobierno municipal que encabezo, contra todo intento de presión contra el Presidente de la Nación, Alberto Fernández, por parte de una fuerza policial armada.
Esta tarde un grupo de policías armados, ya decididamente insurrectos, montó un cerco sobre la Residencia Presidencial de Olivos, algo inadmisible desde todo punto de vista.
Lo que inicialmente pudo haber sido un reclamo salarial y de condiciones de trabajo, dejó de serlo y se transformó en un movimiento armado inaceptable contra las instituciones de la democracia, y en particular de un Gobierno que conduce los destinos de la Argentina por imperio de la voluntad popular.
Exhortamos a todas las fuerzas políticas, sociales, sindicales y de derechos humanos provenientes del campo popular, a pronunciarse en defensa de las instituciones, de las autoridades legalmente constituidas y de la democracia en todo el territorio nacional.