Este martes, el Consejo de la Magistratura de San Carlos de Bariloche comenzó de manera semipresencial el juicio político contra la jueza multifueros, Erika Fontana, quien se encuentra acusaba de graves desórdenes de conducta y mal desempeño en sus funciones.
En una audiencia semipresencial, el Consejo de la Magistratura encabeza desde este martes, en los tribunales de Bariloche, el juicio político contra la jueza multifueros de El Bolsón, Erika Fontela, a quien se la acusa por graves desórdenes de conducta y mal desempeño en sus funciones.
A la jueza Fontela se la acusa de haber ejercido violencia laboral contra personal del juzgado de El Bolsón y también mantener un trato inadecuado a los abogados denunciantes en el juzgado durante el tiempo que estuvo a cargo del Juzgado de Familia, Civil, Comercial, Minería y Sucesiones 11 de esa ciudad desde febrero de 2016 hasta el 12 de abril de 2019, cuando pidió licencia y al mes siguiente fue suspendida.
En tanto, el presidente de la Magistratura, Ricardo Apcarian es el encargado de encabezar el proceso mientras que el procurador Jorge Crespo y la la fiscal jefe Betiana Cendón sostienen la acusación y esperan que a lo largo de tres días declaren más de treinta testigos.
En el debate participan los legisladores Lucas Pica, Julia Fernández y por Zoom el legislador Nicolás Rochas. Al mismo tiempo, el Colegio de Abogados de Bariloche es representado por Silvio Barriga, Erika Alday y Claudia López.
Según informaron, la jornada de este martes comenzó con impugnaciones realizadas por la defensa a cargo del abogado Rodolfo Rodrigo, luego el Procurador desarrolló la acusación y declaró la enjuiciada.
En total hay 81 testigos citados al juicio, entre los que se cuentan empleados del juzgado de El Bolsón, abogados de esa localidad y de Bariloche, jueces y funcionarios judiciales, policías y vecinos.
Tras la investigación, se concluyó que había elementos suficientes para formular cargos a Fontela.
En ese marco, el Consejo dispuso el 27 de noviembre de 2019 enviar el sumario al Procurador, que presentó la acusación el 10 de febrero del año pasado, pero la pandemia por coronavirus demoró un año el enjuiciamiento.