Los aires de Radio Nacional El Bolsón, parecen estar pasando un no muy buen momento, con una aparente interna de intereses encontrados que quizás estén marcados por una puja de poder y algún interés externo de meter la cola generando aún más presión a una olla a punto de explotar.
Se trata de una emisora de importante alcance y significación social, que supo consolidar el nexo entre los pueblos urbanizados y la población en ruralidad; lamentablemente hoy hay quienes afirman que la radio atraviesa una situación técnica deplorable, con falta de inversión y mantenimiento, que no hace más que ir en desmedro del espíritu y rol de comunicación de la radio estatal.
Si bien algunos dicen que la olla está a punto de explotar , la emisora estatal parece haber colapsado fruto por la pandemia y vive una interna , en la que trascendieron las paredes de la radio, haciéndose publicas varias cuestiones, relacionadas con críticas que apuntan al gerente nacional de la emisora; y la ausencia del director asumido en el marco de la nueva gestión de gobierno nacional; como así también la polémica generada por nuevas incorporaciones al staff del personal marcadas por un tejo de discriminación específica sobre una de las personas aparentemente por su posible pertenecía política y condición sexual.
A todo esto se suman expresiones con lenguaje poco feliz que rozan la falta de respeto a la audiencia de la emisora estatal que parece estar navegando por el aire en piloto automático sin dirección aparente.
Si bien la interna de radio nacional El Bolsón, ya tomó trascendencia pública, los trabajadores de la entidad aún no se han manifestado públicamente, varios de ellos por lo bajo han dejado visibilizar su descontento y vergüenza ante la situación que se atraviesan; y total rechazo a cualquier hecho de maltrato laboral y discriminación.
¿Cuál será el verdadero motivo discriminador: Pertenecía política o condición sexual ?
En tanto se conoció que Franco Fernández, quien fuera incorporado días atrás al staff de la emisora, es quien habría sido el blanco de comentarios discriminatorios, y en su segundo día de trabajo se le impidió presentarse a desarrollar su jornada laboral, bajo la excusa que “pertenecería al partido PRO”, aunque, también trascendió que el motivo cierto fue su condición de homosexual.
Al respecto Fernández, indicó “de ser así, se trataría de un hecho doblemente grave, porque si se toma lo político, pese a que no soy y nunca fui del PRO, se estaría vulnerando un derecho constitucional, porque hasta donde sé, los argentinos tenemos el derecho de afiliarnos a partidos, gremios y de expresar nuestras ideas religiosas libremente. Y me resulta extraño que se ponga eso como excusa, teniendo en cuenta el momento difícil que vive el país en materia laboral y lo que significa generar una expectativa de trabajo, no digo para mí, para cualquier persona”.
Sin embargo, lo más preocupante sería “la discriminación por ser gay”. Fernández dijo que, si bien no le consta, llegó a sus oídos que una empleada administrativa había dicho que “ese puto no va a laburar acá”.